Un equipo de seis talentosos médicos, fueron los protagonistas luego de asumir el gran reto de operar a un feto que tenía una masa quística en su espalda. El procedimiento hecho en Barranquilla tuvo como objetivo quitarle la masa al pequeño y tomar un fragmento de piel del mismo e injertarlo en la zona, sin la necesidad de interrumpir el embarazo de la madre.
Miguel Parra, fue el doctor que conoció el caso y quien al principio le informó a los padres que era mucho más riesgoso esperar a que el bebé naciera y hacer la operación, debido a que los fetos tienen metabolismo hasta cuatro veces más rápido que los de un bebé recién nacido, lo que potencializa las probabilidades de recuperación. “Era un feto de 25 semanas cuando lo operamos, ya ahora tiene un mes de nacido. Tenía una masa que estaba llena de líquido. Su columna vertebral no se cerró y formó una gran masa que ocupaba el 90% de la columna. Era riesgoso operar en cavidades pequeñas”, señaló el ginecólogo.
Aunque la operación fue un poco riesgosa, actualmente el bebe tiene un mes de nacido y a partir de su evolución se ha considerado que fue un caso exitoso, debido a que el niño no se afectó con malformaciones, además de que según el ginecólogo, tiene la probabilidad de tener un 90% de vida totalmente normal.