El partido más duro de su vida fue el que jugó ayer el defensor central de Junior, Howell Mena. A pesar de que tenía enfrente al líder del campeonato, América de Cali, su principal rival fue él mismo. Mena tuvo que soportar el dolor de haber perdido a su mamá hace apenas unos días y salió adelante con la ayuda de sus compañeros. Su actuación fue una de las más destacadas en medio del triunfo 3-1 sobre los ‘diablos rojos’ y al final dejó salir la emoción contenida y explotó en lágrimas.
A mediados de la semana pasada Howell Mena recibió una noticia devastadora: el fallecimiento de su señora madre Luz Aurora Posada Villa, hecho que hizo poner en duda su presencia en el partido contra América, en el que se perfilaba como reemplazo del suspendido Nicolás Zalazar.
Sin embargo, el técnico César Farías le dio la responsabilidad y Howell le respondió con temperamento y categoría. En los actos protocolarios sus compañeros exhibieron una pancarta con un mensaje de aliento. «Luz Aurora Posada Villa, siempre te llevaremos en el corazón. Descansa en paz. Fuerza Howell», era el mensaje que contenía.
Antes del juego se guardó un minuto de silencio en homenaje póstumo a su madre, cuya foto se proyectó en las pantallas del estadio. Pero el mejor tributo fue el que le brindó su hijo dentro de la cancha.