En el programa El Termómetro, el tributarista Rigail Romero, analizó distintos aspectos de la reforma tributaria. Entre estos, la propuestas de gravar a iglesias, universidades públicas y otros sectores en Colombia.
«Hay organizaciones sin ánimo de lucro que desviaron su objetivo y eso se debe perseguir, meter en cintura. Se debe dividir el tema entre la iglesia y las empresas que comercializan la fe, son dos cosas completamente distintas», manifestó Romero.
El experto señaló que aquellas iglesias de los barrios, que hacen actividades para ayudar a los niños, jóvenes y ancianos, no van a tener ese tipo de problemas, pero sí hay otros lugares que se «convierten en unas verdaderas industrias de la fe», y esas son a las que se les debe apuntar el pago de impuestos.
Por último enfatizó, que el Gobierno debe ser muy inteligente para la aplicación de la reforma, para que no haya desacuerdos en la sociedad, y se le dé «prioridad al bienestar común».