Fumadores tienen un 80% más de probabilidad de hospitalización

Uno de los principales problemas que presentan los fumadores es la destrucción de los cilios, los pulmones y la nasofaringe.
Los cilios son pequeños folículos que ayudan a atrapar virus y mueven sus restos fuera de los pulmones, para que no permanezcan allí y no haya afectaciones. Actuando de este modo, en medio de uno de los sistemas de mayor defensa contra infecciones. Sin ello, los fumadores están indefensos. Esto explica mucho sobre por qué los fumadores que presentan una gripe normal pueden desarrollar una congestión prolongada de semanas o incluso, meses. En cambio, alguien que tenga un estilo de vida saludable, puede salir de este tipo de crisis de manera más rápida.

Un nuevo estudio publicado en BMJ Journal, ha recolectado más datos que evidencian la letalidad de la fusión entre el tabaquismo y el virus COVID-19, en primera instancia, luego de que al comienzo de la pandemia una investigación asegurara que fumar podría ayudar a proteger contra el virus.
En dicho estudio, los resultados presentados señalaron que los fumadores tienen entre 60% y 80% más de probabilidad de ser hospitalizados. Además, tienen más probabilidades de morir a causa de esta enfermedad.
Ante esto, Ashley Clift, doctor de la Universidad de Oxford, y su equipo de investigación se basó en registros de salud, los resultados de las pruebas COVID, datos de admisiones hospitalarias y los certificados de defunción. De este modo, por medio de una aleatorización mendeliana, se utilizaron variantes genéticas como sustitutos de un factor de riesgo particular.
Las variantes contribuyeron a determinar si cierto individuo tiene más probabilidades de fumar o fumar mucho, con el objetivo de obtener más pruebas y establecer una relación causal.
Con los datos recopilados, el equipo pudo identificar la relación entre el tabaquismo y la gravedad del virus presente a nivel mundial, afirmando que “en comparación con aquellos que nunca habían fumado, los fumadores actuales tenían un 80% más de probabilidades de ser ingresados en el hospital y significativamente más probabilidades de morir de COVID-19 si se infectaban”.