En un mundo dominado por hombres, Abby J. Cohen emergió como una figura destacada, desafiando estereotipos y marcando un hito en el mundo de las finanzas. Desde sus humildes orígenes como hija de migrantes polacos en Queens, Cohen demostró desde temprana edad una afinidad por los números y una pasión por la economía que la llevaría a conquistar Wall Street.
Graduada en Economía e Informática de la Universidad de Cornell y con un máster en Economía de George Washington, Cohen inició su carrera en 1973 en la Reserva Federal, donde demostró ser analítica y observadora. Su ascenso meteórico la llevó a convertirse en directora de investigación en T. Rowe Price y posteriormente a ocupar puestos clave en Drexel Burnham Lambert y Goldman Sachs.
En Goldman Sachs, Cohen dejó una marca imborrable al ser nombrada copresidenta del comité de políticas de inversiones en 1990 y, posteriormente, directora general en 1996. Su capacidad para predecir tendencias en los mercados la consolidó como una gurú respetada en el mundo financiero, ganándose el reconocimiento tanto de colegas como de inversores.
Pero su influencia no se limitó solo al ámbito corporativo. Cohen también ocupó la presidencia del Global Markets Institute, donde contribuyó a moldear las políticas que han dado forma al sector financiero de EE.UU. hasta el día de hoy. Su legado perdura como una inspiración para las mujeres que buscan abrirse camino en un campo históricamente dominado por hombres.