Armando Ruiz
El pasado domingo 7 de mayo la Procuraduría General de la Nación trajo a colación uno de los recientes casos que han sonado desde la cárcel El Buen Pastor, el cual incluye a la condenada excongresista Aída merlano Rebolledo, por el altercado que tuvo con una guardiana que le había encontrado un celular escondido en su celda.
El Ministerio Público anunció que se encuentra indagando a funcionarios del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec), por las agresiones que se presentaron tanto a Merlano como a la servidora pública. Cabe mencionar que el hecho se dio a finales del mes de marzo, cuando la guardiana se encontraba realizando un procedimiento de requisa y le halló a la excongresista un teléfono móvil.
La reacción por parte de la interna fue causarle contusiones en el brazo derecho y cara a la mujer que la requisó, así lo reportó el Inpec. Dicha situación será verificada por el ente de control, puesto que el director del Inpec, el coronel Daniel Gutiérrez, informó a los miembros de la Procuraduría de esas agresiones que habría recibido la guardiana.
Por otra parte, Miguel Ángel del Río, quien es abogado de Merlano, denunció que su clienta habría sido víctima de una golpiza en una de las celdas de la cárcel El Buen Pastor y según él hay un «diagnóstico médico de Merlano en el que se asegura un traumatismo contundente múltiple y esguince en el tobillo derecho de esta». Con base a ello, la Procuraduría ordenó la práctica de pruebas para determinar cuales fueron las responsabilidades de funcionarios públicos del Inpec y poder esclarecer lo que ocurrió en medio de la requisa y posterior a ella.