El 27 de enero de 2018, es una de las fechas que recuerda el terror que dejó el atentado a la Estación de Policía del barrio San José, en Barranquilla, a manos del Eln. Cinco años después y luego de largas audiencias en contra de tres presuntos responsables, la sensación de impunidad palpita en los sobrevivientes y familias de los uniformados fallecidos, al no tener una condena justa.
El 17 de noviembre del 2022, la historia se oscureció aún más, puesto que por medio del recurso de vencimiento de términos, los acusados por terrorismo quedaron en completa libertad. Nilson Mier Vargas, Dalila Duarte Martínez y Cristian Camilo Bellón, por medio de una decisión de un juez de garantías quedaron libres.
La diligencia se basó en que los acusados permanecían tras las rejas y ya habían cumplido el tiempo determinado (150 días), a partir de la fecha de inicio de la audiencia de juicio y teniendo en cuenta que no se ha llevado a cabo la audiencia de lectura de fallo, tal y como se establece en la Ley 1760 de 2015.
Es por esto que la esperanza es poca en los afectados por el caso, el cual reposa en la Fiscalía y el Juzgado único Penal Especializado de Barranquilla. Este último lleva el proceso en etapa de juicio en contra de los tres acusados. El ente acusador, quien tiene las pruebas conseguirá una sentencia o no.