Con la presencia de variantes del virus COVID-19 a nivel mundial, la Organización Mundial de la Salud autorizó la aplicación de dosis de refuerzo. Ante esto, múltiples estudios han concluido que el refuerzo de una vacuna heteróloga incrementa la efectividad de la vacuna.
A su vez, uno de los puntos clave por lo que este tipo de vacunación se ha autorizado tiene relación con la eliminación de la desigualdad de recursos para comprar vacunas, obstáculo presente en países de bajos recursos.
Pero, ¿qué ventajas trae la vacunación heteróloga? Según la FDA se afirma que “no se identificaron preocupaciones significativas de seguridad” en el período de tiempo del estudio. Los efectos secundarios reportados reflejaron los síntomas similares a los de un resfriado que muchos sienten después de las vacunas en una serie homóloga, como fatiga, dolor de cabeza, escalofríos y dolores musculares.
Así mismo, Monica Gandhi, experta en enfermedades infecciosas de la University of California, San Francisco, manifiesta que recibir una dosis de refuerzo de otra marca también podría disminuir el riesgo de efectos secundarios poco comunes relacionados con las vacunas. Por lo que al ofrecer a las personas de alto riesgo una vacuna de refuerzo que es diferente a la original, “se espera que tal vez se disminuya la tasa de ambos”.
Según Gandhi, la combinación de biológicos podría llevar a tasas de transmisión más bajas a nivel mundial. Si el individuo presenta niveles más altos de anticuerpos, como se vio cuando J&J fue reforzada con Pfizer o Moderna, es menos probable que contraiga una infección luego de la vacunación y que transmita el virus a otras personas.